TURQUÍA HA ROTO LAS LINEAS ROJAS
El derribo del avión ruso por parte del ejército turco, abre la región a una escalada de violencia improcedente desde la Segunda Guerra Mundial y pone a prueba quien realmente tiene la voluntad de combatir a DAESH y sus semejantes como Jabhat Al Nasra y otros grupos relacionados con el Qaeda. El avión ruso fue abatido en el espacio aéreo sirio, en la zona de Latakia, donde el ejército sirio está recuperando territorios a los grupos relacionados con el Qaeda, principalmente Jabhat El Nasra (está en la lista de organizaciones terrorista), los dos pilotos cayeron en territorio sirio, y uno de ellos fue asesinado por Jabhat El Nasra y el otro salvado por soldados sirios. y que desmintió la versión turca.
Turquía ha roto las líneas rojas, en un momento, que a nivel internacional se está articulando una alianza contra DAESH y el terrorismo, y se está buscando vías para una solución política a la guerra en Siria. Todos los analistas, tanto occidentales, como del frente contrario, coinciden en el papel de Turquía en el apoyo a los grupos armados islamistas y oscurantistas, apoyo logístico, en armas y en la financiación a través de la compra del petróleo y del gas procedente de los pozos dominados por DAESH y Jabhat El Nasra. Turquía es el territorio de paso para los jihadistas que van a Siria e Iraq, como de los que vuelven a Europa, eso lo reconoció el propio presidente francés, reclamando la colaboración de Turquía para cerrar sus fronteras a los terroristas que vuelven a diferentes países europeos.
El desarrollo de la situación en el terreno, después de la intervención militar rusa, perjudica los intereses no tanto del pueblo turco, sino del gobierno islamista de Erdogan. Un informe del ministerio de defensa ruso asegura la destrucción de más de 500 transportadores de petróleo que se dirigían desde las regiones de DAESH hacia el territorio turco, de otra parte, la intervención rusa y el avance en el terreno del ejército sirio sobre todo en las zonas de Latakia y Alepo, próximas a las fronteras turcas, desmontan las aspiraciones del gobierno turco de ocupar una parte del territorio sirio bajo el pretexto de crear “zona segura”. No es casualidad, que al día siguiente del derribo del avión ruso, el presidente turco manifiesta la voluntad de su gobierno de establecer una zona dentro de Siria para “proteger a la minoría de origen turco”, y fija la zona entre Jrabuls i el mediterráneo.
Turquía no es el único país perjudicado de la región, de cómo se están evolucionando los acontecimientos y las correlaciones de fuerzas en Siria, también Qatar, Arabia Saudita e Israel están en la misma situación. Qatar ha financiado y todavía financia a los grupos terroristas, el último apoyo a estos grupos es la compra de misiles tierra-aire a Ucrania, entregados ya a Jabhat El Nasra y a otros grupos del Qaeda para su utilización contra los aviones rusos. Arabia Saudita que ha aspirado ser una potencia regional cuyo papel no se limita a la financiación sino al adoctrinamiento ideológico. Las aspiraciones de Israel son parecidas a las de Turquía, desmembrar a Siria, debilitarla y también crear una zona “de seguridad” en el sur de Siria y cerca de los altos del Golán.
La política de estos países en relación con los grupos takferistas y oscurantistas, no les concierne solo a ellos, sino también a sus amigos a nivel internacional. Estos países son aliados de EEUU, de Francia y de Inglaterra, que teóricamente están en guerra contra el terrorismo de DAESH y Jabhat El Nasra. EEUU tiene montada su Alianza contra DAESH y el Qaeda, Francia esta articulando su propia alianza también, como pueden justificar que sus más cercanos aliados son los que financian, arman a los grupos terroristas, y dificultan las acciones de la aviación rusa contra esos grupos. Europa en general y Francia en particular, cómo puede justificar delante de la opinión pública, la alianza y la amistad con países que financian y apoyan a grupos que no solo asesinan a sirios, iraquís, egipcios, libaneses, tunecinos, sino también a franceses y europeos. Los grandes negocios de Francia y de la venta de armas van a estos países concretamente a Arabia Saudita y Qatar. Eso nos hace pensar, o poner en duda la seriedad de Francia, Inglaterra y EEUU en combatir realmente a esos grupos asesinos y fascistas. Los objetivos no están claros, ¿la guerra es contra DAESH?, o ¿contra las libertades democráticas, y los propios valores de la libertad, fraternidad y justicia? La política de occidente, y de la OTAN, desde la guerra contra Iraq, la guerra en Afganistán, en Libia, en Siria, y en Yemen, todas esas guerras han servido en la práctica de suporte directo o indirecto a los grupos takferistas y fascistas. El apoyo a los llamados “rebeldes moderados”, se ha demostrado como dijo el mismo Obama que es una fantasmada, ha sido realmente y en el terreno apoyo a DAESH, y al Qaeda con todas sus ramificaciones. Ni EEUU, ni Francia han conseguido aclarar y determinar quién son en el terreno “los rebeldes moderados”.
La falta de responsabilidad, de coherencia, y de firmeza por parte de occidente y de la OTAN, en contra de los países que financian y apoyan los grupos terroristas, nos está llevando a una nueva guerra generalizada, y los primeros víctimas de esta guerra son los pueblos de oriente medio, el propio pueblo sirio, el pueblo iraquí, el pueblo palestino, el pueblo yemení, el libanés y una lista interminable.
Se está jugando con fuego, Turquía no hubiera atrevido provocar a Rusia, si no tiene el apoyo y el visto bueno por parte de la OTAN. Asi empiezan las “grandes guerras”.