LA DECLARACIÓN FINAL DEL 4º CONGRESO DE LA IZQUIERDA EUROMEDITERRANEO

2019-04-09 20:01

 

Se ha celebrado en Beirut-Líbano, entre el 29 al 31 de marzo 2019, el 4º Congreso de la Izquierda Euro mediterránea  con la participación de 48 representantes de 31 partidos de izquierda, de 21 países del mediterráneo.   El Partido Comunista Libanés ve ser el partido anfitrión.

La región del mediterráneo y alrededores se han transformado en un lugar de confrontación abierta, provocando la muerte, la destrucción, el desplazamiento, y la explotación creciente a consecuencia de las políticas agresivas que practican los estados imperialistas y sus aliados regionales y a  consecuencia de las políticas de explotación social y la represión practicadas por los gobiernos y regímenes contra los pueblos de la zona y contra el medio ambiente.

La realidad en la cual pasa nuestra región es una parte de la nueva realidad internacional, donde se cambian y se modifican las alianzas a medida del retroceso continuo de EEUU como un polo mundial dominante, y el paso hacia un mundo multipolar con una diversidad de fuerzas internacionales influyentes, y el reflejo de esta nueva situación a nivel regional y entre otras en nuestra región.

Los pueblos del sur y del este del mediterráneo han sufrido las consecuencias destructivas de las guerras, las ocupaciones y de las confrontaciones en Palestina, Siria, Iraq, Libia, Yemen, Chipre y Sahara Occidental. El proyecto “de un nuevo oriente medio” patrocinado por EEUU representa un proyecto de desmembramiento y de división basándose sobre todo tipo de confrontaciones sectarias y étnicas, aprovechando de los crímenes y las practicas de las organizaciones islamistas extremistas, para poner las bases de su intervención y volver a redefinir las fronteras geopolíticas para asegurar la continuación de las mejores condiciones de la hegemonía de EEUU y sus aliados en la Alianza Atlántica sobre los recursos y las riquezas de la región.

Últimamente, el hecho más peligroso es el plan de Trump y la administración de EEUU, conocido por “el pacto del siglo”, que propone liquidar la causa palestina,  acabar con todos los derechos del pueblo palestino, su derecho a la autodeterminación y la construcción de su estado nacional independiente y el derecho al retorno de los refugiados. En ese ámbito, EEUU intenta redefinir el significado del término “refugiado” para eliminar el derecho al retorno, a través de privar a los hijos de los palestinos del reconocimiento como personas refugiadas, y disminuir el número de refugiados palestinos con derecho al retorno, de varios millones a unas decenas de miles de ancianos. Al mismo tiempo, la decisión de EEUU de bloquear la financiación de la UNRWA, el organismo de la ONU encargado del apoyo a los refugiados palestinos, provoca el parálisis de ese organismo y priva al pueblo palestino en los campamentos de sus derechos básicos en sanidad y educación, y es un factor más en contra del derecho a la autodeterminación y es para obligar a la naturalización de los refugiados en los países limítrofes. La agresión sionista contra los palestinos continúa, se expandan los asentamientos, y el cerco y las agresiones contra Gaza incrementan, aprovechando del apoyo total de EEUU, de la UE y de la OTAN.

La decisión del gobierno y del Parlamento israelí de afirmar “el carácter judío” del estado de Israel, representa un paso más en privar a los ciudadanos árabes de sus derechos, amenaza su futuro y su existencia a través de nuevas olas de deportaciones, es una cadena más en las políticas de discriminación y de apartheid y nos recuerda a las políticas de limpieza étnica que se ha producido en un pasado próximo. Los partidos reunidos condenan con fuerza, y rechazan el apoyo continuo y permanente por parte de EEUU, sus aliados y los regimen seguidores a esta ley y a los pasos complementarios tomados, como el traslado de las embajadas a Jerusalén, que representa un golpe fuerte en la línea de liquidar lo que queda de derechos para el pueblo palestino.

Los partidos de la izquierda en la región del mediterráneo condenan todo tipo de agresiones, guerras, ocupaciones y las sanciones que practican EEUU, Israel y Turquía contra los pueblos de la región. Los partidos instan al cese inmediato de la guerra que encabeza Arabia saudita contra Yemen, el cese de la ocupación turca al norte de Siria y el norte de Chipre. Los reunidos condenan la ocupación israelí a los altos sirios del Golán, y manifiestan su firme condena a la decisión de EEUU de reconocer la soberanía israelí sobre el Golán ocupado, y rechazan la pretensión de Israel de anexionar a Cisjordania. Condenan la represión sistemática contra las libertades públicas en Turquía y las políticas represivas contra el pueblo kurdo y el encarcelamiento de los líderes de la oposición y entre ellos los líderes del partido de los Pueblos Democrático. Los partidos de la izquierda manifiestan la solidaridad con el derecho del pueblo palestino a su estado nacional independiente y cuyo capital Jerusalén, y el derecho al retorno a todos los refugiados, como el apoyo al derecho de todos los pueblos de la región en la resistencia  contra las ocupaciones y las agresiones, y el derecho de los pueblos a su autodeterminación.

Los partidos reunidos apoyan una solución política a la crisis en Siria, asegurando los derechos políticos a todo su pueblo e incluido a los kurdos, en el ámbito de un estado laico, democrático y la retirada de todas las fuerzas de ocupación y de injerencia, el levantamiento de las sanciones y el inicio de la reconstrucción y agilizar el retorno de los refugiados. Los reunidos apoyan una solución al conflicto de Chipre según los acuerdos firmados y las resoluciones de la ONU, sobre la base de un estado federal de dos regiones para dos pueblos y para la reunificación del país y la retirada de las fuerzas de ocupación turca, y acabar con su militarización.

Los partidos apoyan una solución política acordada, que asegura el derecho a la autodeterminación para el Sahara occidental, la celebración de un referéndum sobre las bases puestas por la ONU. Los partidos condenan la ocupación israelí a los territorios libaneses en la Granja de Shebaa, las colinas de Kfarshouba y el Ghajar, y las violaciones, las agresiones terrestres, aéreas y marítimas y el intento de controlar sus riquezas energéticas, y manifiesta el apoyo al derecho del pueblo libanés en la resistencia contra la ocupación y en frente de las amenazas y las presiones políticas y económicas.

Las agendas del neoliberalismo de las fuerzas capitalistas en el norte y el sur del mediterráneo han provocado el aumento de las explotaciones clasistas, del paro, del hambre, y de la pobreza entre los pueblos del mediterráneo. Los acuerdos de libre comercio, las privatizaciones y las políticas de los gobiernos de la región que visan  proteger las ganancias ilimitadas del capital presionando sobre los logros sociales y los derechos de la clase trabajadora en la región.  Esta insaciable ganancia del sector privado provoca en incrementar la explotación de la naturaleza y los recursos naturales, esa explotación extrema del ser humano y de la naturaleza parte de los principios del mismo régimen capitalista, las grandes potencias en la Unión Europea continuan imponiendo sus políticas sobre todos los pueblos del continente, para proteger al capital, a la banca y el intento de solucionar sus crisis estructurales, relacionadas con las deudas y el déficit a cuenta de los pueblos europeos. La respuesta de los partidos de la izquierda será a través de continuar la confrontación con el capitalismo para una alternativa socialista al servicio de las clases explotadas y los pueblos, al servicio del medio ambiente, y en contra de la extrema derecha en todas sus formas.

El fenómeno de la inmigración continua creciendo a causa de las guerras en la región y en el continente africano, como a causa de la pobreza y el hambre, y de los cambios climáticos y sus efectos sobre la agricultura y el agua. Los efectos del capitalismo y del imperialismo se ven claramente en los fenómenos de la inmigración del sur hacia el norte. Anualmente mueren ahogados en el mediterráneo miles de refugiados, transformando nuestro mar en un cementerio colectivo, es el resultado de las políticas de inmigración que practica la Unión Europea, y la utilización de los países del sur como guardianes de sus fronteras marítimas, y las políticas de militarización de los países de la región que practican EEUU, la Unión Europea  y la OTAN. El crecimiento de la extrema derecha y las fuerzas neofascistas en Europa basándose en un discurso racista y de xenofobia es consecuencia de esa política.

El capitalismo representa un peligro sobre la existencia y la vida sobre el planeta, la explotación extrema de la naturaleza, el modelo de consumo, la contaminación del aire, el agua y la alimentación, aumentando los riesgos sanitarios sobre la población, como el aumento de la temperatura de la tierra provoca fenómenos climáticos extremos, ya es una amenaza contra la vida humana a largo plazo. Los partidos participantes considera que la lucha para un medio seguro es el meollo de la lucha para un futuro mejor para la humanidad, y se complementa con la lucha de liberación, social y democrática de nuestros pueblos del mediterráneo como para todos los pueblos del mundo.

La lucha de los pueblos de la región contra los regímenes y gobiernos reaccionarios continua, contra la explotación, la represión y la confiscación de los derechos democráticos y las libertades públicas, los pueblos del golfo, del sur del mediterráneo en sus luchas para el cambio democrático a pesar de todos los impedimentos y las dificultades impuestas por sus regímenes.

Los pueblos de la región expresan sus sufrimientos, dolores y explotación a través de las revueltas contra sus gobiernos y sus regímenes, el levantamiento del pueblo sudanés es un ejemplo claro de esas luchas para la libertad, para la liberación nacional y social, como hay que destacar las movilizaciones populares en el Líbano, Argelia, Iraq, Jordania, Túnez, y Marruecos, y también en Francia y en otros países que expresan el fracaso de las políticas practicadas en la mayoría de los países de la zona. Las fuerzas de la izquierda juegan un papel importante en esas revueltas, y concretamente el partido Comunista Sudanés que juega un papel esencial en el levantamiento popular en Sudan.

    

  Los partidos de la izquierda manifiestan su solidaridad y su apoyo a las movilizaciones sociales que está en el corazón de la lucha para el progreso y el cambio en la región, saludamos especialmente las luchas del pueblo sudanés y exigimos la libertad inmediata a todos los presos políticos en las cárceles del régimen, y llamamos la atención sobre  la represión salvaje que practica el régimen contra esas movilizaciones progresistas y valientes.

Condenamos la política represiva del régimen egipcio, la vuelta al poder militarista, y su política de marginar y reprimir las libertades públicas, y concretamente la libertad de expresión  el derecho a la organización política y sindical.

Expresamos nuestra solidaridad y nuestro apoyo a las movilizaciones sociales, para el progreso y el cambio en la región. Hemos estado en el corazón de las movilizaciones y las huelgas del 8 de marzo, el día INTERNACIONAL DE LA MUJER, que ha sido efectivo y excepcional este año, que se ha transformado en un día histórico en muchos países. Los partidos de la izquierda continuaran en su compromiso en la lucha diaria para la liberación de la mujer y la construcción de las sociedades feministas basadas sobre la igualdad en derechos para todos sus componentes.

Hoy existe una necesidad más que nunca, para revisar las políticas sobre todo los acuerdos comerciales que han provocado el derrumbe de las economías de los países del sur, el cese inmediato de todos los proyectos de militarizar la región. Hay que poner los intereses y los derechos de la clase trabajadora y los derechos humanos por encima de los intereses del capital y las ganancias. Estas guerras financiadas por las industrias armamentistas internacionales representan una fuente de ganancia sin precedente en la historia. La izquierda tiene que estar sin vacilación a favor de la paz, y la utilización de nuestras potencialidades para realizar nuestro proyecto alternativo. Los partidos de la izquierda llama a los gobiernos del norte del mediterráneo a parar inmediatamente todas las ventas de armas y los programas de entrenamientos que dan apoyo a la ocupación israelí o a los regímenes de la región que utilizan esas armas en guerras contra otros pueblos, contra sus propios pueblos  en la represión, queremos un mediterráneo libre completamente de las armas nucleares.

La seguridad y la estabilidad mundial no se pueden conseguir sin hacer frente a las aspiraciones expansionistas, y de dominio imperialista, manifestadas últimamente en la nueva ofensiva contra los países y los pueblos de Latinoamérica, sobre todo contra Venezuela.  Los partidos del encuentro de la izquierda, expresan su rechazo a los intentos de cambiar el régimen venezolano, utilizando  la fuerza por parte de EEUU y sus aliados, expresan su solidaridad con el pueblo venezolano en su batalla nacional, por su soberanía nacional y para completar los objetivos de la revolución bolivariana.

La cooperación a través del mediterráneo hay que basarse sobre los intereses de los pueblos, y no sobre los intereses del capital, tiene que basarse sobre los valores de la igualdad, los intereses comunes, la laicidad, los derechos humanos, y la propiedad colectiva sobre los recursos naturales y los medios de producción. Los partidos de la izquierda tienen que continuar en su trabajo conjunto para profundizar en la cooperación entre sus cuadros, sus sindicatos, y sus organizaciones sociales para realizar nuestros objetivos y nuestros intereses comunes contra la ocupación y la explotación.