ESTUDIO SOBRE LA SITUACIÓN DE LOS REFUGIADOS PALESTINOS EN EL LíBANO
Desde que empezó la crisis de los refugiados sirios, los refugiados palestinos en el Líbano sufren en el olvido. Las organizaciones humanitarias y el estado libanés centra sus preocupaciones en las personas huidas de la guerra en Siria, olvidando más de 280.000 refugiado palestino que continúan privados de la mayoría de sus derechos sociales y económicos, están en situación de marginación y sin ayudas.
La situación de los refugiados palestinos (antiguos refugiados) ha cambiado mucho desde la llegada de los nuevos refugiados, al Líbano han llegado 1.500.000 refugiado sirio, y a estos hay que añadir 42.000 palestinos huidos de Siria.
La Universidad Americana de Beirut ha hecho un nuevo estudio por encargo de la UNRWA sobre “la situación económica y social de los refugiados palestinos en el Líbano, 2015”, el estudio está dividido en dos: la primera parte sobre los refugiados palestinos que habitan en el Líbano desde mucho tiempo, y la segunda parte sobre los refugiados palestinos que han llegado recientemente de Siria.
LA POBREZA DOMINA LOS CAMPAMENTOS
Según el estudio, el número de refugiados palestinos registrados en la UNRWA son 496.000 personas, pero el nombre real es en entre 260.000 a 280.000. El 63% de los refugiados palestinos viven dentro de los campamentos, dentro de 12 campamentos, en cambio el 37% vive fuera de los campamentos. La mayor concentración de refugiados palestinos es en el sur del Líbano, y exactamente en el campamento de Ain El Heloui (15%) y el Rachidiye (12%), en el Bekaa son del 4%, en el norte son del 20% y el Monte Líbano y Beirut son del 24%.
Los palestinos que han llegado de Siria, la mayor parte han llegado entre los años 2012 (37%) y 2013 (48%), el 55% se han instalado en los campamentos existentes (el 14% en Ain El Heloui).
El estudio hace comparación de los refugiados palestinos entre el 2010 y el 2015, según el estudio si el nivel de pobreza severa ha disminuido de 6,6% a 3,1%, pero el nivel de pobreza en general se mantiene en 65%. La pobreza por campamentos, en Saida ha disminuido la pobreza en general en 8% y en Tiro de 9%, en cambio en el norte ha crecido en 11%. Eso quiere decir que 168.000 refugiado palestino no tiene asegurada la alimentación y las necesidades básicas, y 7000 refugiado no tienen ningún tipo de alimentación. El promedio de gasto individual es de 195 Dólar al mes, mucho más bajo del gasto promedio de un libanés que es de 429 dólares al mes. Lo que sí es claro en el estudio, que la pobreza general y severa es mucho más elevada dentro de los campamentos que fuera. De los refugiados palestinos llegados de Siria, la pobreza severa es del 9%, y la pobreza general es del 89%, donde el gasto por persona es de los 140 dólares al mes.
EL NIVEL DE ESTUDIOS Y EL PARO:
El estudio destaca que el nivel de educación es elevado entre los refugiados palestinos del Líbano, en cambio bajo entre los refugiados palestinos llegados de Siria, pero ese alto nivel de educación no limita el crecimiento del paro, en 2010 era del 8%, en 2015 es del 23,2%, y entre los refugiados palestinos llegados de Siria es del 52,5%. El estudio no analiza las causas del aumento del paro, pero si señala las limitaciones impuestas por el gobierno libanés. Menos del 14% de los palestinos tiene un contrato de trabajo, y la gran mayoría trabajan en la economía sumergida e informal. El sector privado emplea el 77%, en la UNRWA el 4,6%, y en las ONGs es del 3,8%. El 70% trabajan en sectores no cualificados, y el 50% son jornaleros (cobran por día), como el nivel de endeudamiento de las familias es del 36%.
Esa situación se refleja también en la situación sanitaria de los refugiados palestinos que en su totalidad cuentan con los servicios sanitarios de la UNRWA, el 63% de los refugiados tienen en menos uno de la familia con enfermedad crónica, y entre los refugiados palestinos llegados de Siria es del 75%. El estudio constata que la situación sanitaria se mejora en paralelo con el nivel de educación y la inserción laboral.
Sobre la seguridad alimentaria, el estudio demuestra que la situación no se ha mejorado, solo el 38% tiene la seguridad alimentaria, otro 38% esta privado de la seguridad alimentaria media, y el 24% sufre la inseguridad alimentaria severa. Entre los llegados de Siria, el 6% están en la situación de inseguridad alimentaria media, y el 63% en la inseguridad alimentaria severa.
Diario “Al Akhbar”- Beirut